La verdad popular empuña el hacha para hacer leña y calentar su soledad con el árbol caído. Manos libres de pecado alzan el mazo a boca abierta para debatir tras la puerta. El corrillo se exculpa pasando la culpa. Togas caseras dictan sentencia ajena con su verdad de la buena. En la sala sonrisas a la cara aumentan su cara, con la que fabrican vidas perfectas por fuera para rodar por la ladera, la correcta, única y verdadera.
Me declaro culpable de parar a un lado para verlos pasar, me recuerdan al ciclismo de competición...tanto sudar para no ver el paisaje.
2 comentarios:
si si si es todo relativo :P jajaja
doce
Todo depende del color del cristal que elijas.
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